León fue la tercera provincia de España con mayor mortalidad y, por la cola, la cuarta en nacimientos

 

Una vez más, las estadísticas demográficas del INE vuelven a señalar a la provincia leonesa como una de las más perjudicadas. Una cuestión que la pandemia y su afección sobre las personas mayores ha agudizado, pese a que en empadronamientos en 2020 León tuvo una cifra positiva. Porque el movimiento de la población se compone tanto de las migraciones como de la mortalidad y natalidad, y la provincia leonesa lleva años en los peores puestos en ambos casos. Y el 2020 no ha sido una excepción.

 

Según el Instituto Nacional Estadística, León ha presentado en 2020 la tercera mayor tasa de mortalidad de las provincias de España: 16,71 muertos por cada 1.000 habitantes. Solo Zamora (18,94 fallecimientos por millar de habitantes) y Soria (17,11) tuvieron peores datos. La cifra de León se disparó el año de la pandemia más de tres puntos, subiendo un puesto respecto al 2019 en el ranking de provincias con mayor número de fallecidos en función de su población.

 

La cifra total de muertos en la provincia de León fue de 7.634, según el INE. En el 2019 ascendió a 6.152, con lo que se produjeron 1.482 muertos más.

 

Además de sus elevados datos de mortalidad, influenciados por su elevado número de población mayor, la provincia leonesa también destaca, para mal, en sus datos de natalidad, arrastrados también desde hace años. La tasa bruta de natalidad fue en 2020 de 4,99, menos de cinco niños nacidos por fracción de cada mil habitantes. Esta tasa en el 2019 era de 5,15. Con las cifras en la mano la provincia de León vuelve a ocupar el cuarto puesto a nivel provincial, pero por la cola, en nacimientos, igual al obtenido en 2019. Solo se comportaron peor en nacimientos Asturias (4,70), Ourense (4,75) y Zamora (4,68).

 

El número de nacimientos registrados en la provincia en 2020 ascendió a 2.278. En 2019 esa cifra fue de 2.370, con lo que en el año de la pandemia hubo 92 niños nacidos menos.

 

 

Castilla y León fue la comunidad con mayor mortalidad en 2020 según se desprende del Movimiento Natural de la Población y de los Indicadores Demográficos Básicos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La tasa bruta de mortalidad de la comunidad, es decir, defunciones por cada 1.000 habitantes, se sitúa en el 15,1, lo que la convierte en la más alta del país, a 4,7 puntos por encima de la media.

 

Los datos, marcados fuertemente por la pandemia de la COVID-19, revelan que la comunidad registró en 2020 un 26% más de defunciones que en 2019. En este sentido, Castilla y León es la tercera comunidad con peores datos, solo superada por la Comunidad de Madrid (41,2% más de fallecimientos) y Castilla-La Mancha (32,3%). La media nacional se sitúa en el 17,7%.

 

En cuanto al crecimiento vegetativo negativo, es decir, nacimientos menos defunciones, Castilla y León marcó la peor cifra del país, con -22.543 personas. La única comunidad con datos similares fue Cataluña, que perdió 21.659 personas según este indicador. El crecimiento vegetativo a la baja de Castilla y León se produce por la suma de una altísima mortalidad y un bajo número de nacimientos.

 

En 2020, nacieron 14.323 niños en la comunidad, un 4,9% menos que en 2019. Si bien los datos no son tan negativos como en otras regiones. La cifra coloca a Castilla y León como la octava comunidad en la que más han caído los nacimientos, aunque la cifra autonómica es la más baja en 20 años. En 2010 se marcó el pico de nacimientos, con 20.486 frente a los 14.323 de 2019.