“Que el abuelito salga de esta…”

“Que encuentre este año el amor verdadero”, “que se consolide el castillo y no se caiga ni una sola piedra más”, “que mi padre encuentre trabajo”, “que pase de curso sin dejar ninguna”, “que el abuelito salga de esta”… Más de un centenar de deseos y peticiones surcaron la noche del sábado los cielos de Cea ‘subidos’ a otros tantos farolillos voladores en el marco de la primera ‘Noche de los deseos o de las luciérnagas’, una iniciativa impulsada por la Junta Vecinal de Cea que, en su primera edición, consiguió colgar con creces el cartel de “completo”.

Así, decenas de vecinos y vecinas de Cea, también otros muchos de pueblos próximos, se reunieron entusiasmados en la plaza de la localidad ribereña en una noche especialmente despejada y cálida para ser testigos de esta primera suelta de globos de luz que consiguió iluminar, además del cielo, los ojos de todos los participantes.

Vigilados sólo por una luna casi llena, la jornada arrancó con una breve exposición a cerca del uso, funcionamiento y normas de seguridad de las conocidas como ‘sky lanterns’, confeccionadas en papel, y con un pequeño dispositivo que, una vez prendido, calienta el aire que aloja el globo y lo ayuda a emprender el vuelo. En este sentido cabe adelantar que no se produjo ningún incidente a lo largo del encuentro.

Mientras, los más pequeños, se afanaban en escribir sus peticiones en pequeñas hojas de papel que, una vez metidas en sobres y anudados a su vez a las linternas, volarían posteriormente por el cielo leonés.

Terminado el ritual, la marabunta tomó posiciones en el entorno del Castillo de Cea y, a lo voz de tres, mecheros y cerillas iniciaron el baile. Prendidos los dispositivos, las lámparas ‘despertaron’ estirándose lentamente y, tomando temperatura, elevaron el vuelo salpicando de luz el cielo.

Emoción en las miradas, besos, aplausos… la primera ‘Noche de las luciérnagas’ convenció al personal y a la propia organización que, minutos después, ya estaba maquinando cómo será la edición de 2016.