35 kilómetros de historia, deporte y cultura

 

Tras dos años de ‘descanso’, la Marcha BTT de la Cañada Real volvió a reunir en Matallana de Valmadrigal a más de medio centenar de entusiastas del ciclismo, fieles a la llamada del Club Deportivo La Torre y la firma Bicicletas Carlos organizadores del evento, en el que también colaboró la Junta Vecinal de Matallana.  

La ruta, que alcanzó su edición XVI, se desarrolló sin contratiempos y con la meteorología a favor: de Matallana hasta la ermita de San Cristóbal, de ahí a Fontanil de los Oteros y, de ahí, a Gusendos, punto elegido para una parada técnica que sirvió para reagrupar a los participantes. De nuevo sobre la bicicleta, el pelotón partió a Pobladura donde se hizo una pequeña visita guiada a una de sus bodegas. Retomado el aliento, el pelotón se dirigió por carretera hasta Fuentes de los Oteros, de ahí a San Pedro, Santa María y vuelta a Matallana, donde se sirvió un vino español para todos los participantes. “Siempre se hace un trozo de la Cañada Real, vía que da nombre a la ruta”, indica Aníbal Bartolomé, uno de los impulsores de la prueba. “La idea es seguir haciendo la ruta hasta que el cuerpo aguante, añadiendo variaciones para conocer mejor la comarca y poner en valor sus recursos culturales, históricos e incluso gastronómicos. Queremos dar un poco de motivación a los jóvenes en estos meses de menor actividad”, indica.