Mucho ruido y muchas nueces en la Subasta de los Pasos de Sahagún

 

Con la climatología de su lado, el pueblo de Sahagún despertó este fin de semana decidido a revivir las primeras escenas de su Semana Santa, declarada de Interés Turístico Provincial y, actualmente, en la carrera por el reconocimiento nacional. 

Fue el pregón, a cargo del musicólogo leonés, Héctor-Luis Suárez Pérez, el acto que sirvió de acostumbrado inicio y también como sentido homenaje al fallecido cofrade Valentín Mon. Un minuto de silencio con el público en pie recordó a este conocido sahagunense tan ligado a la Semana Santa.

Por su parte, el pregonero dibujó una panorámica de aquellos elementos imprescindibles pero invisibles que acompañan el Triduo Sacro y marcan su carácter. Aspectos sociológicos, gastronómicos, musicales o etnográficos.   

Un concierto de la Banda Sinfónica de Sahagún (tocaron media docena de marchas procesionales) puso el broche de oro a la primera jornada penitencial en la villa del Cea que, el domingo, ganó carácter popular gracias a la Subasta de los Pasos.

Una subasta que también echó de menos a Valentín –el era el encargado desde hacía décadas- pero que indiscutiblemente supo defender con tanta o más elegancia su hijo Jorge, que ya sustituyó a su veterano padre el pasado año, cuando la enfermedad de Mon le ponía difícil seguir con sus rutinas.

Tal vez en su memoria, la Capilla de Jesús escenificó el domingo una de las subastas más animadas y con más ‘piques’ que se recordaba. Y también de las más generosas desde el inicio de la crisis económica sumándose una recaudación final de 3.639 euros. 

El mecanismo de la Subasta de los Pasos es sencillo. Los hermanos subasteros –Jorge y Sofío Mon, su tío- se dirigen al público para preguntar si hay alguien interesado en portar uno de los pasos que saldrán en procesión durante el Triduo Pascual. Cuando la primera voz grita una cifra, los subasteros inician el diálogo… “¿Hay algún hermano o devoto que de más limosna por su Santa Lleva?. Es buena a la una”. Más de  500 veces tuvieron que repetir el ‘mantra’ Jorge y Sofío para ‘deshacerse’ de los ocho pasos que saldrán, este Viernes Santo: Trompa (62 euros); Bombo (60 euros); Las Banderas (60 euros); Cruces Cortas (131 euros); Cruz Grande (190 euros); Santo Cristo de los Entierros ( 936 euros); Santo Sepulcro (500 euros) La Soledad (1.700 euros).  

Aunque siempre hay pasos ‘estrella’ en esta ocasión hubo riñas para casi todas las piezas sumando finalmente una recaudación de 3.639 euros, más de 500 euros que el año pasado. 

Casi dos horas después, finalizada la subasta, la Plaza Mayor se hacía con la atención del público a propósito del XII Certamen Nacional de Música Procesional en el que participaron las siguientes formaciones: Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno de León; Banda de Cornetas y Tambores La Inmaculada de Nava del Rey (Valladolid); Banda de Cornetas y Tambores del Amor y de la Paz de Salamanca y Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía de la Oración del Huerto y Santa Vera Cruz de Medina del Campo, Valladolid