Albino Pastrana de Prado ‘sopla’ 100 velas

 

La residencia Hogar San José (Sahagún) acogió ayer la fiesta de cumpleaños de uno de sus residentes, Albino Pastrana de Prado, nacido en Bercianos del Real Camino y nuevo miembro del selecto ‘Club de los Centenarios’ que cada año alcanzan más personas a este lado de la provincia.

 

Rodeado de su gran familia, amigos y compañeros de residencia, el señor Albino disfrutó de una jornada de cumpleaños llena de sorpresas, regalos, homenajes y mucho cariño en forma de recital de poesía, proyecciones… y hasta un menú especial. 

 

Albino Pastrana de Prado nació en el seno de una familia de labradores el cinco de febrero de 1920, en Bercianos del Real Camino. Su padre, Juan Pastrana y, su madre, Gregoria de Prado, tuvieron nueve hijos, ocupando Albino el cuarto lugar de descendencia. 

 

Su adolescencia, que ya no era un camino de rosas, pronto se vería truncada y, todavía menor, fue llamado a filas, reclutado y, sin querer, convertido en protagonista de uno de los capítulos más negros de la historia de España. 

 

Pero la cabeza de Albino ha preferido ‘resetear’ y descansar de todo aquello. Descansar de la guerra, del trabajo duro en el campo, de la pérdida temprana de su madre, la de su padre… dejando paso, a pesar de los años, a la ilusión del que sopla 100 velas. 

 

“Formó matrimonio con Encarnación Rueda Quintana y, fruto del mismo nacieron sus tres hijas: Goya, Angelita y Encarnita. Ellas aportan seis nietos, que suman a la descendencia otros cinco bisnietos”, explica Pablo García, uno de sus nietos.

 

Junto Encarna, desempeñaron labores agrícolas y ganaderas, de las que dependía el sustento familiar. En aquel entonces: cereal, viñedo, un rebaño de ovejas, una pareja de vacas y otra de mulas para labrar la tierra.  

“De la forja de su vida, basta mirar sus grandes y recias manos, que reflejan bien lo acaecido”, dice Pablo.