La subida de temperaturas, el deshielo, y las lluvias, aumentarán los caudales en la cuenca del Duero

 

La borrasca 'Filomena' y el largo episodio de temperaturas anormalmente bajas tocan a su fin. Aunque hasta el martes todavía se darán registros mínimos negativos, a partir del miércoles subirá el termómetro y llegarán las lluvias. Tanto el deshielo como las precipitaciones harán aumentar los caudales de los ríos en las cuencas del Duero, el Tajo y el Ebro, según la predicción de la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología).

 

El cambio de tiempo llegará provocado por una borrasca atlántica que se acerca por el oeste y que aportará aire cálido y húmedo. La presente situación anticiclónica, que favorece las heladas generalizadas y, por ello, la persistencia de la nieve y de las placas de hielo en el suelo, permanecerá hasta el martes 19, si bien estas heladas serán cada día más débiles, señala la Aemet.

 

La previsión apunta a que durante el jueves y el viernes se produzcan lluvias asociadas a sucesivos frentes atlánticos y se mantenga el flujo cálido del suroeste, lo que provocará un aumento de las temperaturas dando lugar a valores claramente más altos de lo habitual para la época del año. Este aumento de las temperaturas, especialmente de las mínimas, junto con las lluvias, provocará una progresiva fusión de la nieve acumulada. Como consecuencia, es probable que se incremente de forma significativa el caudal de los ríos, especialmente en aquellos cuyas cuencas mantienen grandes extensiones de nieve, en particular del Duero, el Tajo y el Ebro.